jueves, marzo 09, 2006

UN DÍA DE PREMIO

El 8 de Marzo "Día Internacional de la Mujer", las mujeres en
Arteixo vivimos un día cargado de simbolismo, reivindicación, ilusiones y sueños, lágrimas y risas. Para mi fue muy especial porque recibí de las manos de nuestro Alcalde D. Manuel Pose Miñones, el Premio Xornalístico "Dora Vázquez" del Concello de Arteixo, simplemente por escribir algo que me nacía en el corazón, escribir sobre la situación de la mujer no es nada nuevo desgraciadamente, pero es una forma de reivindicar nuestros derechos.
Lo mejor del galardón fue sin duda, estar rodeada en ese momento de personas con una gran calidad humana, y permanecerán imborrables en mi memoria, las numerosas felicitaciones y las muestras de cariño sincero.
Por la tarde en mi puesto de trabajo en una pastelería y en la soledad de una tarde de pocas ventas, los acontecimientos ocurridos a lo largo de la mañana pasaban por mi mente como una película grabada en ella. De pronto, de la vitrina de los pasteles, surgieron voces, risitas y murmullos:
-Mirad que arrogante está hoy la dependienta- decía la remilgada Milhoja de Merengue- está orgullosa con el premio "Dora Vázquez", a ver quien la soporta a partir de ahora.
Sus compañeros los pastelitos de bizcocho, las ranitas de chocolate y los píos de crema y nata, reían y cotilleaban. ¿Qué estaba pasando?, me pregunté, ¿Acaso todo lo ocurrido ese día era tan sólo un sueño que en esos instantes se estaba convirtiendo en subrrealista, o quizá el éxito, efímero, se me estaba subiendo a la cabeza?. De pronto les lancé una mirada desafiante, y cogiendo las pinzas de acero les dije: Silencio u os agarro y os vendo a todos... Y el silencio se hizo de nuevo en la vitrina.
Pero aún me aguardaban más sorpresas ese día, y a las nueve de la noche un auto me esperaba en la puerta de la pastelería. No, no era una limusina como corresponde a las protagonistas de los grandes eventos, sino un humilde Forito que conduce mi hija Rocío. En el Centro Social de O Froxel, la Asociación de Mujeres Andanza, de la cual formo parte, organizó un acto conmemorativo en el Día de la Mujer, amenizado por el grupo de baile gallego de Uxes, presidido por Pastora, presidenta de la Asociación, y dirijido por Anxelina.Como todos los actos sucedidos a lo largo de una jornada tan especial para nosotras, fue emotivo y reivindicativo, y para mi sorpresa, mis compañeras de la asociación, nos entregaron, a mi y a otras mujeres, un hermoso obsequio.
Al final, y como broche de oro, un deseo compartido por tod@s los allí presentes, y pronunciado por la cálida voz y las hermosas palabras de Tita, que recojo textualmente: "Ojalá pronto dejemos de celebrar este día, y todos los días del año sean del hombre y de la mujer, y en su lugar, celebremos tan sólo el Día de la Humanidad."